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Arquitectos: DMG Estudio de arquitectura
- Área: 250 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Arq. Gonzalo Viramonte
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Proveedores: Aluar, Ariston, FV, Holcim, Ilva, ferrum
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto fue realizado para un grupo familiar compuesto por adulto con tres hijos/as adolescentes, de vida social activa.
La vivienda se ubica en San Salvador, barrio próximo al área central de la ciudad de Córdoba, constituido principalmente por viviendas unifamiliares y caracterizado por tener lotes de aproximadamente de 350.00m2. La parcela se sitúa en el límite norte del barrio, definido por una barranca que balconea al río Suquía, espacio urbano que atraviesa la ciudad. Esta situación topográfica brinda la posibilidad de aprovechar las visuales sin interferencias.
El lote, de 10.20 metros de ancho por 33.70 metros de largo, posee doble frente: uno orientado al sur sobre la calle La Rioja, desde donde se ingresa, y otro orientado al norte, sobre la calle Humberto Primo; existiendo una diferencia de nivel de ocho metros entre ambas calles. El frente sobre Humberto Primo, es también, el remate de la calle Francisco Caballero.
La casa se implanta en el terreno dando respuesta a dos situaciones diferentes. Hacia el norte, en los niveles superiores, se genera una marcada apertura para aprovechar los beneficios del asoleamiento y para favorecer las visuales hacia la ciudad. En el nivel inferior, se busca consolidar un frente como remate urbano de la calle Francisco Caballero, conteniendo la barranca y generando un espacio de encuentro y permanencia para el barrio. Hacia el sur se define una expresión cerrada e introvertida.
El programa se organiza en tres niveles: sector social en planta baja, sector privado en planta alta y el sector de servicios y pileta (parcialmente enterrados) en el nivel inferior, conteniendo y nivelando el terreno. La vivienda posee dos patios concebidos de diferente modo: el de mayor tamaño como “terraza urbana” hacia el norte; el de menor tamaño como estructurante del programa.
Este último, en planta baja, articula el sector íntimo con el sector público y, en planta alta, separa el dormitorio del adulto de los dormitorios de los adolescentes con el objeto de independizar ambos sectores. La secuencia de los patios posibilita, por un lado, una continuidad espacial y visual que inicia en el estar y culmina en el patio-terraza pudiendo disfrutarse las visuales lejanas de la ciudad desde todos los ámbitos de planta baja y, por el otro, hace posible la ventilación cruzada norte-sur en toda la casa.
Una galería en doble altura es el ámbito que articula la casa con la terraza hacia el norte, se constituye como espacio de transición interior-exterior y representa el cambio de escala que va de lo doméstico a lo urbano.
La materialidad se definió mediante losas y tabiques de hormigón visto con encofrado de fenólicos y muros de ladrillo cerámico con revoque blanco. Las protecciones solares necesarias hacia el norte se diseñaron en metal con lamas horizontales y hacia el este, con lamas verticales del mismo material.